Creo que ya no creo en el Credo. Todo tipo de organizaciones, reuniones, mítines religiosos, políticos, de autoayuda o cualquier índole me dan escalofríos. Antes creía que la unidad hacía la fuerza. No digo que no sea así, pero me estoy volviendo descreída. Leí un artículo de Stephen Hawking, ni siquiera recuerdo de qué iba, de física claro, o de agujeros negros, pero de repente me encendió una bombilla y ya nada volvió a ser igual en mi interior. Antes había leído otros escritos de este señor y no había tenido transformación ninguna. He estado algo inquieta desde entonces, con mi bombilla encendida, pero también me sentía más desprotegida. Y miraba/miro a las personas de otra manera. Ya no soy la misma. Aún no sé si es bueno o malo. Descreo de los de derechas y sus procesiones, gominas, rosarios y botos rocieros, tambíen descreo de los de izquierda resentida con argumentos intolerantes. Todos son intolerantes, unos y otros. Descreo de la religión colectiva sin fundamentos y descreo del ateísmo convencido porque sí. Mejor tener dudas. Descreo de muchas profesiones tales como periodistas del corazón, futbolistas, toreros, marqueses o los que inventaron "el día de...cualquier enfermedad, pariente, festividad etc". No creo en el dinero (quizá porque ayer no me tocó la lotería) y de cómo sólo se puede vivir pendiente de él.
Cuando miro las estrellas o un cielo abierto por la noche, sí creo, pero no sé en qué...¿intuición, esperanza, arrojo? Incluso rezo...a veces...creo. O a lo mejor hablo conmigo misma. Ni siquiera sé si existe la palabra descreer, pero ya dije que me gusta inventar palabras. Sea como sea, no he dejado de creer en las personas, que es lo único que sabemos que es real.
Mejor dejar de leer a Hawking asi parte de la confusion se ira .
ResponderEliminarLee mejor a K Jibran .
La confusion es un contagio de el entorno muchas veces.
cachis, eso me pasa por leer el periódico. Leeré a los poetas ;) gracias Josemy
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