sábado, 25 de febrero de 2012

El apartamento, de Billy Wilder

He comenzado a ver cine clásico, y la primera película ha sido "El apartamento", de Billy Wilder. Voy a hacer una crítica, aviso, no soy crítica de cine, bueno, mejor serán reflexiones, un poco de sophias por aqui haciendo honor al nombre del blog, ya que nadie pilla de qué va y muchos son los que me preguntan quién es Sofía. Pues yo, y todos, de eso se trata.
Bueno, El Apartamento, lo que me gusta del cine clásico es que es rápido y no te da tiempo a aburrirte. No hay escenas vacías, ni rellenos, cada segundo es parte de la historia. Como todos la habréis visto pues no hay reparo en decir de qué va: de un tipo, un buen tipo, que le presta su apartamento de soltero a sus directivos, siempre con frases como "llegarás muy lejos si sigues así", o por el contrario, "si no me das lo que te pido te vas a la calle". Así que el hombre tiene que ingeniárselas para tener una agenda ordenada con todas las citas y vive situaciones embarazosas con sus vecinos y no puede disfrutar de su casa como él quisiera. Está coaccionado.  Pero es un hombre de buen humor. Vale, la chica, siempre hay una chica, eso es así. Es la pizpireta ascensorista y a él le gusta e intenta salir con ella, pero ella está enamorada de otro, y aquí viene el lío, es el director de la empresa que a su vez se entera de lo del apartamento y le pide a él que se lo deje. Y yo creo que la peli en realidad, detrás de todo lo cómico de la situación del apartamento y los tejemanejes, va de la soledad de sus protagonistas bajo esa fachada de risas y buena disposición para todo. Ellos dos se hacen amigos, aunque él está loco por ella e intenta que no sufra con ese amor de mentira que le da su jefe. En un momento de la película ella dice llorando llena de churretes: ésa soy yo, la idiota feliz, siempre riendo. Pero en verdad se muere por recibir amor de la persona que se supone que debería dárselo y no hace más que engañarla. Y bueno, al final, después de muchos sinsabores para ella y de la decisión de él de dejarlo todo y marcharse lejos, parece que se le enciende una bombilla a la chica y va corriendo a buscarlo y aquí viene una de las cosas que más me gustan de cómo se hacían las cosas antes: Él le dice: La amo, Srta. Kubelik, (ella sonríe), ¿ha oído lo que le he dicho? Estoy profundamente enamorado de usted.
¿Por qué ya nadie hace eso? ¿Por qué hoy en día decir te quiero asusta? Parece que está prohibido a no ser que hayas pasado mínimo cinco noches con esa persona. Si dices te quiero sin que haya habido "algo más" es como estar loca, chalada (o loco, chalado). Que vuelvan el romanticismo y las buenas maneras, por favor. Querer a una persona no implica que te hayas tenido que acostar con ella ni conocer todos sus secretos ni saber punto por punto lo que le gusta y lo que no. Esto es una opinión personal, claro, una crítica.
La película, me ha gustado mucho y es mordaz. Las necesidades de un ser humano más allá de la fachada que da de buen humor, optimismo etc, ahí hay que llegar.

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